He vuelto...

y conmigo momentos para no olvidar (a partir de ahora remember). La cosa pintaba mal, es decir: eramos seis, teniamos solo una tienda para dos, era viernes santo, ibamos sin comida, yo sin saco... en otras palabras, ibamos como siempre, "preparados" y todo a última hora.

Todo se fué solucionando ya que nos juntamos con algunos amigos del pueblo, ya que gracias a esto tuvimos comida a medio dia y tiendas (aunque finalmente siemore durmió alguien en el coche).
Qué decir de Pascua... Desenfreno entre alcohol, electro-house, tropiezos con la ley, declaraciones de amor, amenazas con B A... Aparte, resisitir los cerca de -4ºC por la noche solo en una tienda de campaña (sin saber por qué), mientras llueve, y cuatro matados bailando fuera y gritando "Joshuaaaa!"... memorable a la vez que didactico: el año que viene volvemos.... a Benidorm.

Es cierto que tienes espacio libre para respirar, que estabamos al lado de un rio, en plena montaña, donde se podía gasta cazar gallinas y donde alguien mató un cerdo (no me pregunteis, no se ni yo cómo pasó)... pero el camping lo veo más como una escapada que como unas Pascuas. Pero claro, esa es mi opinión... y eterna batalla: ¿Mar o montaña?