Cultura Industrial (o culutura del "yo estuve allí")

Y es que como el turrón, apareció como de la nada Industrial. Si, tras un año de descanso volvió en su 14 aniversario, lleno de fuerzas, lleno de música (algo arcaica para los asentados en el house), y definitivamente, lleno de gente. Inauguración la cual era epílogo de un cumpleaños (felisitats roiggg) dado comienzo ya a mediodía, con una paella y acompañamiento digno, seguido de una tarde magnificada en sonido y mezcla (mezcla...), acompañados como no de la ultimamente tan amiga cevada de malta.

Llegada ya la noche y con un largo camino que recorrer, atajamos la noche. Atajamos, sí, tal vez dando rienda suelta a un libre albedrío que desembocó en lo de siempre, empujones y poses en la boca del inicio. Inicio no decepcionante, sino más bien previsible, pues se venía venir pero era un hecho no criticable pues nosotros mismos caeriamos en nuestra crítica... Digamos pues, era algo inevitable.

Y de ello surgió lo de siempre. Paseos, pedidos, y situaciones varias con las que jugar media noche, descubriendo una nueva religión... Cual Waldo (piratismeeeeeeee!!! jajaj, nunca dejará de sorprenderme este chaval), descubrimos el Budismo, y con el una nueva esperanza.

Buenas noches...